La televisión tiene aspectos positivos y negativos y es uno de
los factores principales que afectan al desarrollo de los niños.
Si se hace un uso correcto:
La televisión es un medio de entretenimiento y de
aprendizaje: Ya que tenemos muchos programas educativos que los niños pueden
mirar mientras se divierten y aprenden.
Permite relajar a los niños, llevándoles a la calma.
Es necesario que los padres controlen el tiempo que sus
hijos pasan delante de una pantalla ya que si se hace un mal uso de este
dispositivo puede provocar que el niño no se relacione y ni desarrolle algunas
capacidades.
Nos hemos convertido en unos grandes consumidores de la
televisión desde una temprana edad y más aún ahora teniendo a nuestra
disposición canales educativos para niños las 24 horas del día.
Si se hace un uso excesivo los niños pasan menos tiempo con
su familia, amigos o incluso saliendo al parque a jugar.
Es normal observar como en una casa se realiza el desayuno,
la comida o la cena con la televisión puesta mientras que las personas están
calladas, pendientes de escuchar y ver lo que ponen en la televisión.
Aunque los niños tengan otros juguetes, ellos prefieren ver
la televisión ya que les parece más entretenido y les atrae, aislándole de lo
que sucede en el entorno.
Por lo que no desarrollan correctamente la creatividad ya
que este aparato piensa todo por ellos. La televisión no les permite pensar en
cómo será su personaje favorito o como terminará la historia porque ya aparece
todo, sin dejar la posibilidad de que los niños puedan imaginarse algo.
La televisión pueden causar déficit de atención en el ámbito
educativo ya que están acostumbrados a que les enseñen a través de un dispositivo
y no mediante un método tradicional.
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